Este domingo 11 de setiembre es el día del funcionario de la salud privada en el Uruguay.

Día de aquellas personas que tienen como tarea: promover estilos de vida saludable, de concientizar sobre el impacto que para ese fin tiene el tomar las medidas preventivas necesarias realizándonos – según nuestra ubicación en grupos de riesgos – una ser de controles y estudios, coordinar, ofrecer y garantizar consultas que definan otros estudios específicos, acciones concretas o la puesta en marcha de tratamientos terapéuticos, realizar intervenciones específicas, actuar en forma inmediata ante un episodio que ponga en riesgo la vida o pueda dejarle secuelas irreparables a otro ser humano. Día de aquellas personas que organizan, administran, mantienen en condiciones adecuadas de higiene, calidad, confort, seguridad, los centros asistenciales y las estructuras que hacen posible el desarrollo de todas estas necesidades.

A todas esas personas, que hacen las instituciones privadas de salud, que pasan por ellas siendo la cara visible, la imagen, la referencia de marcas que se han impuesto en la sociedad, que son el lugar elegido por la mayoría de los habitantes de los departamentos del interior del país como el mejor lugar para cuidar su salud, las instituciones les saluda, les agradece, les reconoce el esfuerzo, la capacidad de seguir siempre adelante a pesar de las dificultades que a lo largo de los años se han ido superando, y les recuerda, que esta tarea, es de las pocas, donde cada uno de los funcionarios, está simultáneamente, como comúnmente se dice, “de los dos lados del mostrador”.

Por tanto la superación constante, la dedicación, el cariño y el amos que se le ponga a la tarea que cada uno desarrolla, repercutirán en un mejor servicio – en forma directa e indirecta – para la sociedad toda, para sus familias, para cada uno de estos trabajadores que celebran su día.