Con un llamado a la acción a los profesionales de la salud que trabajan en programas de control de la hipertensión se celebró el pasado jueves el Día Mundial de la Hipertensión Arterial.

El conocimiento de las cifras relacionadas con el control de la hipertensión, tanto de los pacientes directos de cada profesional, como la de de la población de la zona de influencia de la institución, así como los indicadores de control de la hipertensión, van a favorecer un diseño efectivo de las estrategias de promoción para lograr que se llevan adelante acciones a favor de un estilo de vida basado en conductas que prevengan la hipertensión arterial.

La hipertensión arterial es una enfermedad que se presenta cuando se eleva la presión arterial en forma sostenida por encima de los valores considerados normales. Habitualmente no da síntomas, por este motivo se la considera el “asesino silencioso”. Se trata de la enfermedad crónica más importante para el desarrollo de enfermedades vasculares a nivel de los riñones, cerebro y corazón, donde en la población uruguaya de 25 a 64 años presenta un aumento de su prevalencia.

Según el primer estudio de Carga Global de Enfermedad de Uruguay, la presión arterial elevada es el segundo factor de riesgo para ambos sexos con más años de vida perdidos por discapacidad, años de vida perdidos por muerte prematura y años de vida saludables perdidos. Sin embargo, casi un tercio de los hipertensos no saben que tienen esta condición.

Conductas que previenen el desarrollo de la Hipertensión Arterial:
Evitar el tabaquismo.
Mantener un peso adecuado.
Moderar el consumo de alcohol.
Una alimentación con consumo moderado de sal.
Comer frutas y verduras a diario.
Realizar actividad física regularmente, evitando el sedentarismo.