Todos necesitamos ayuda, más cuando se trata de dejar de fumar. 31 de mayo, Día Mundial SIN Tabaco
Desde 1987 el 31 de mayo es definido por la Organización Mundial de Salud como el Día Mundial Sin Tabaco. Este hecho se realiza con el objetivo de recalcar los riesgos que implica el consumo de tabaco y fomentar prácticas que prevengan y disminuyan dicho consumo.
Nuestra institución lleva adelante un Programa de Cesación Tabáquica para que los fumadores puedan comenzar a respirar mejor, viviendo una vida sin humo y evitando así los riesgos de padecer graves enfermedades que puedan causar una muerte temprana y evitable.
Los estudios realizados en nuestro país indican que las tres cuartas partes de los fumadores reconocen que planean dejar de fumar, pero que solos no pueden hacerlo. El Programa de Cesación Tabáquica que llevamos adelante es muy efectivo y ha sido – junto a los de otras instituciones que integran el Sistema FEMI – un gran aporte para que en el Uruguay en los últimos diez años sean casi doscientas mil las personas que abandonaran el tabaquismo.
Las consecuencias positivas de la baja en el consumo de tabaco se ven reflejadas en la disminución de los ingresos hospitalarios por infarto de miocardio, los que decrecieron en cerca de un 17% – aproximadamente unos 400 casos por año – siendo mayor la reducción en los menores de 35 años.
Nuestro país tiene una fuerte legislación para desmotivar el consumo de tabaco y aquí está prohibido el cigarrillo electrónico tal como lo recomienda la Organización Mundial de la Salud.
Las sustancias que componen el cigarrillo electrónico lo hacen tan o más perjudicial para la salud de sus consumidores que el tabaco común. Los informes científicos internacionales revelaron que los cigarrillos electrónicos tienen nicotina sin dosificación clara, nitrosamina (un producto cancerígeno), y dietilenglicol, una sustancia muy tóxica, habiéndose demostrado que estos cigarrillos contienen sustancias tóxicas y cancerígenas iguales a las del tabaco.